Renunciar a tu empleo sin tener otro trabajo asegurado es una decisión que muchas personas consideran, pero pocos se atreven a tomar. Aunque en ocasiones puede ser una liberación emocional, también conlleva ciertos riesgos. En este artículo, te ayudaré a evaluar si esta es una opción viable para ti.
El riesgo de la incertidumbre
Al dejar tu trabajo sin tener otro empleo asegurado, te enfrentas a una situación de incertidumbre. Esto puede generar ansiedad, especialmente si no cuentas con ahorros suficientes para mantener tu estabilidad financiera mientras buscas una nueva oportunidad. La falta de ingresos puede aumentar el estrés y afectar tu bienestar emocional.
Estrategias para mitigar el riesgo
Si decides renunciar, es importante contar con un plan de contingencia. Aquí algunos consejos:
- Ahorra un fondo de emergencia: Antes de dar el paso, asegúrate de tener ahorros suficientes para cubrir tus necesidades básicas por al menos 3-6 meses.
- Prepara tu red de contactos: El networking es fundamental. Asegúrate de que tu red esté activa y lista para ayudarte a encontrar nuevas oportunidades.
- Evalúa tus opciones: Asegúrate de tener claro en qué tipo de trabajo deseas estar, y qué sectores están contratando en tu área.
¿Cómo tomar la decisión?
Si tu salud mental y bienestar emocional están comprometidos, renunciar puede ser una decisión válida. Sin embargo, si la incertidumbre financiera te preocupa, lo mejor es comenzar la búsqueda de un nuevo empleo mientras sigues trabajando.
Conclusión
Renunciar sin tener otro empleo es una decisión que debes tomar con cautela. Si no tienes un plan claro, podrías encontrarte en una situación difícil. Evalúa tu situación financiera, tu red de contactos y tus opciones antes de dar el paso. Si necesitas orientación en este proceso, agenda una sesión con nosotros (UF 2) en juancarlostapia@placehunter.cl