La mejor forma para comunicar un despido

“Amor sin Escalas”, es una película protagonizada por George Clooney. En esta película, Clooney interpreta a un frío consultor cuyo trabajo es notificar el despido a empleados de compañías que lo han contratado para dar esta mala noticia….

Hoy, en que la desaceleración de la economía en Chile golpea fuerte a las empresas y comienzan las reestructuraciones con despidos masivos y adecuaciones de los cuadros ejecutivos a la nueva realidad, el informar de manera adecuada el despido hace la diferencia entre una buena y mala Compañía ya que el despido tiene impacto en toda la organización, no sólo en la persona afectada.

En vista de lo anterior el hacerlo bien es relevante para la continuidad de la empresa y su clima laboral.
Tips:

– El despido siempre debiera hacerlo el jefe directo, es decir aquella persona que tuvo contacto con la persona durante su trayectoria en la empresa.

– Ojalá no escoger el día viernes a última hora, ya que la persona no podrá despedirse y el fin de semana los rumores harán del despido una crisis de confianza en la empresa. Tampoco esperar hasta fin de año o Navidad, por que obviamente son fechas más sensibles.

– Muchas veces el jefe no está capacitado para dar la mala noticia, en tal caso éste debiera acompañarse por alguna persona de RRHH o mejor aún por el Jefe del Jefe.

– Las empresas de Outplacement a veces ofrecen la ayuda en este difícil proceso, acompañando a las personas que deben informar a fin de apoyarlos en tal instancia.

– En algunas ocasiones, una vez que la persona es notificada, se le ofrece pasar a una sala contigua donde un consultor de Outplacement le detalla los pasos a seguir ahora que ya se encuentra desempleado, lo que tiene por objeto acoger, contener y dar seguridad en la incertidumbre.

– Un buen consejo para una persona que es desvinculada es decirle que vean este evento como una oportunidad en su carrera profesional para reorientarla o para emprender.

– El tema legal también cobra relevancia es este delicado momento, en razón de lo cual los abogados de la empresa debieran dar el VºBº a las formalidades del despido.

– Se debiera dejar constancia que la persona despedida ha recibido la comunicación oficial de la desvinculación, por lo que se debiera firmar un documento antes del finiquito en la notaría. Si la persona se niega a firmar, puede llamarse a dos testigos que aseguren que la persona ha sido informada y ellos firman el documento que lo acredita.

– Los Programas de Outplacement ayudan a la persona desvinculada a encontrar un trabajo en el menor plazo posible y principalmente ayudan a dar seguridad y mejorar la autoestima de la persona afectada. Es bueno considerarlos al momento de planifica la reestructuración.

– La Desvinculación siempre se debería comunicar de forma privada y discreta, siempre en persona. En la reunión donde se comunica el despido, éste debiera hacerse en forma breve, sin muchos rodeos y claramente que se entienda que la decisión está tomada, que no hay espacio para cambiar la decisión.

– Al dar la mala noticia sólo se debieran ocupar datos objetivos y no tocar ningún tema personal a fin de no entrar en el plano emocional de la persona.

 

Despidos y Amor sin Escalas

Que interesante es leer los casos reales que están detrás de la película Amor sin Escalas. Los despidos, la cesantía y las entrevistas que hicieron de la realidad una película, en este artículo de El Mercurio (emol), revisamos que pasó en realidad con estos casos de desvinculaciones:

Los casos reales detrás de «Amor sin Escalas», la película de George Clooney

Cesantes revivieron su despido para ser actores de Hollywood
Carla Gardella Berra

Fuente: El Mercurio Febrero 2010

«Si perdiste tu trabajo y quieres ir a una entrevista a contar tus sentimientos, envíanos tu foto». Esto decía un aviso en los diarios de dos ciudades norteamericanas. El remitente no pretendía ofrecer empleo ni asesoría a los cesantes. Su objetivo era conseguir reacciones espontáneas frente a un despido para una película.

Así se mezcló la realidad con la ficción ya que, sin ser actores, los seleccionados aparecieron en «Amor sin Escalas», representando a trabajadores que George Clooney deja sin trabajo.

 «Hay que entender que los despidos no son algo personal, sino por la economía»

«No sé cómo usted puede soportarse a sí mismo, pero estoy seguro de que encontrará la manera, mientras que el resto de nosotros está sufriendo». Así protesta Andy cuando su jefe lo despide en la película. Si bien, no fueron las palabras que dijo en la realidad, es lo que le gustaría haber respondido cuando sin previo aviso lo echaron del cargo de gerente comercial de un concesionario de automóviles de lujo.

Debido a su situación debió trasladarse con su familia a otra ciudad. «Creo que algunas empresas despidieron a los empleados para protegerse de posibles problemas financieros, en lugar de tener fe en que ellos podrían ayudarlos a recuperarse», dice.
Después de cuatro meses cesante lo contrataron en un rubro completamente nuevo para él. Actualmente es gerente de relaciones para padres de una empresa que administra 61 escuelas subvencionadas.

«El consejo es recordar que hay 10 millones de personas pasando por lo mismo»
«No sabía qué iba a pasar conmigo. Pensé que era una empleada valiosa». Profunda angustia sintió Kelly Bertha cuando después de ocho años en el holding AT & T la echaron en junio de 2008. Esa angustia la expresa en la película mediante una agresiva respuesta a su jefe cuando éste la despide y que incluyó varias groserías.

Kelly aún no tiene empleo estable, sólo ha trabajado en empleos temporales. Para ella, lo más duro es que «a pesar de que uno sabe lo que vale su trabajo, las compañías pagan menos porque tienen el control», afirma. No obstante, Erin nota que la economía se está recuperando. «Poco a poco veo más puestos de trabajo disponibles en las industrias locales. Sólo falta tiempo y paciencia».

«Aunque fue emotivo revivir mi despido en la película, fue una terapia contar la experiencia»

En octubre de 2008 Erin Welsh-Krenger recibió una llamada del departamento de recursos humanos de la agencia de publicidad en la que trabajaba hacía un año. Le dijeron que ese día debía abandonar la empresa, porque su puesto había sido eliminado. «Sentí que yo no era de ninguna utilidad», cuenta Erin.

Para ella lo más difícil de esta situación, que nunca antes había vivido, fue la incertidumbre y el estancamiento temporal que se genera.

Su cesantía duró seis meses, ya que volvió al lugar donde había trabajado antes como asistente de investigación biomédica. «Mi mejor consejo para recuperarse de una situación así es tomarse tiempo para adaptarse a los cambios, pero no perder mucho tiempo en el luto de la pérdida», dice.